Maxicollares

Collares grandes que destacan por sí solos

Los maxicollares son collares grandes y llamativos que se distinguen por su diseño elaborado y por su tamaño. Suelen llevar piezas grandes, cadenas gruesas, piedras llamativas, colores vivos, materiales atrayentes o formas abstractas.
Ocupan una parte destacada del pecho, del cuello y a veces también de los hombros, siendo un punto importante de cualquier vestuario.
Los maxicollares no se diferencian únicamente de los collares discretos y pequeños por su tamaño sino a su vez por su capacidad de llamar la atención y porque no pasan desapercibidos.
Un maxicollar es una joya expresiva y audaz que transforma tu apariencia y que refleja tu estilo personal de forma impactante.
Asimismo, los maxicollares no se limitan a ofrecer un único estilo. Existen modelos modernos, elegantes, clásicos, extravagantes, bohemios, etc. Esto permite que cada persona pueda encontrar el maxicollar más adecuado a su vestuario, a su personalidad y ocasión.
Los maxicollares son mucho más que simples adornos. Son verdaderos complementos de expresión personal que reflejan nuestra personalidad. Estos collares tan peculiares son piezas únicas que consiguen agregar un toque de elegancia a un look simple.
Estas joyas han sabido conquistar el sector de la moda, convirtiéndose en un elemento imprescindible para las que quieren expresar su individualidad y destacar su estilo propio.

La fascinante historia de los maxicollares

Durante milenios, los collares de gran tamaño han acompañado a la humanidad y han ejercido diferentes papeles, tanto como símbolos de estatus y de poder, como de adornos personales o de creencias religiosas.
En las civilizaciones antiguas, los maxicollares eran elementos clave en la simbología y en el vestuario.
Durante el antiguo Egipto, la nobleza y los faraones lucían collares anchos elaborados en oro y ornamentados con piedras preciosas, como la cornalina o el lapislázuli. Estos collares no eran únicamente accesorios para decorar el cuerpo sino que simbolizaban la riqueza y el poder divino y la conexión de los faraones con los dioses.
Los diseños intrincados de esa época, confeccionados con motivos de dioses, escarabajos y jeroglíficos, protegían al portador y brindaban un significado espiritual profundo.
En otras culturas propias del Mar Mediterráneo, como la romana o la griega, aunque los maxicollares tenían un diseño más delicado que el de los collares egipcios, también tenían su importancia en la vestimenta.
Para ceremonias religiosas y ocasiones especiales se usaban collares de oro decorados con gemas. Las mujeres romanas de clase alta lucían collares de piedras preciosas y de perlas como símbolo de su riqueza y de su estatus.
Con el tiempo, estos complementos han ido evolucionando, adaptándose a las diferentes modas y culturas.